A día de hoy, en pleno 2019, en España todavía no se ha aprobado ninguna ley ni regulación sobre las criptomonedas, y lo único que se produce son conversaciones, unas primeras directrices sobre cómo declararlas y poco más. En consecuencia, las empresas y plataformas de intercambio de criptomoneda viven en una zona gris, no estando directamente reguladas y por supuesto no se pueden acoger al fondo de garantía de depósitos.
Sin embargo, lo que ocurre en el mercado es otro tema. Criptomonedas hay de muchas clases. Las criptomonedas viven un auge, impulsadas por el éxito de ciertos modelos, y están demostrando que se han creado para quedarse.
No es ningún secreto que el Banco de España, en consecuencia, no está autorizando todavía empresas, entidades ni plataformas de intercambio de criptomonedas. Las autoridades del Banco de España consideran que, aunque las criptomonedas no van a sustituir a las monedas fiat (tradicionales), es evidente que deben ser tenidas en cuenta como método de pago y también para canalizar inversiones y transferencias de activos.
Aunque el Banco de España fue de las primeras instituciones en reconocer a las criptomonedas como activos, como un tipo de dinero, en 2012, su posición frente a ciertas notas informativas publicadas sigue siendo ambigua al respecto. La práctica es no denominarlas monedas sino activos.
Más clarificador es el Banco Central Europeo, que define las criptomonedas como “tipos de dinero no regulado, digital, que se emite y por lo general se controla por sus desarrolladores, y que es utilizado y aceptado entre los miembros de una comunidad determinada”. No es de extrañar pues que cada vez más, los propios usuarios toman las riendas de sus finanzas (al margen de los bancos y entidades bancarias tradicionales) y se atreven a entrar en esos mercados.
Las criptomonedas son también las responsables de que muchas entidades privadas de préstamo y crédito puedan ofrecer productos personales, como los préstamos rápidos online, a precios más competitivos que nunca, también a través del denominado blockchain.
En los últimos años se ha multiplicado la emisión y el uso de las llamadas criptomonedas. Existen más de 1.600 monedas virtuales actualmente en circulación a lo largo y ancho del planeta, con una tendencia que se espera se confirme al alza, y cada vez mueven más volumen de mercado financiero, superando los $13 billones a nivel mundial.
Aunque ningún estado ha reconocido todavía a una criptomoneda como moneda de curso legal, no es menos cierto que muchas regiones y países han dotado a las criptomonedas de legalidad y como método de pago, entre ellos países como Venezuela o Japón, y regiones de Estados Unidos como Florida.